Doctor On Duty.
Doctor On Duty.
por Invitado Mar Jul 23, 2013 4:36 pm
Sin haber tenido alguna opción para meditar, se encontraba en Lorie, famosa por su belleza y todos los comercios que había en ella. Ese sitio estaba lleno de gente siempre, perderse era algo tan sencillo como aparecer en un sitio sin orientación, como era el caso del joven Derek, quien no tenía ni idea de dónde ir ni qué hacer. Se suponía que tenía que prepararse para algo, comprar algún objeto para ¿Batallas? Si bien él se quedaba en la retaguardia, no veía el por qué de necesitar armas, al fin y al cabo, no tenía pensado irse a algún terreno peligroso él solo, necesitaba a alguien que le defendiera. El chico recorría las calles de la ciudad, mirando cada una de las tiendas con asombro, no era una costumbre estar en sitios así, era la primera vez que venía, así que todo era extraño y atractivo. Por ahora quería centrarse en encontrar la típica plaza que toda ciudad admirada y famosa debía tener, esa plaza llena de jugadores interactuando entre sí, para encontrar algo de información.
Fue una tarea bastante tediosa porque siempre acababa en el mismo sitio. O eso o es que todas las calles eran iguales, pero al final consiguió encontrar la plaza, que tenía una hermosa fuente en el centro, parecía ser de mármol, pero tampoco podía dar muchos datos si no era un experto en eso. Una de las cosas más curiosas, es que nadie le había parecido reconocer como médico llevando el traje que no había tenido ocasión de cambiar, además de que tampoco había visto ningún sitio parecido a un hospital, nada relacionado con eso. Quizá la gente herida no tuviera cabida en esa ciudad o puede que estuviera en una parte que aún no ha visitado, pero hasta que lo supiera, esa era una duda más a preguntar a alguien. A pesar de todo lo que intentaba disimularlo, se le notaba a kilómetros que el pobre Derek estaba más perdido que un pulpo en un garaje. El sentido de la orientación no era una de sus virtudes precisamente, aunque tampoco era un defecto, si bien con un mapa podía encontrarse fácilmente.
Derek empezó a mirar a todos lados muy desconcertado, la plaza era un lugar muy concurrido y ahora estaba en la misión de encontrar alguien que estuviera solo o al menos que lo pareciese, para poder preguntar algunas cosas. Estar más perdido que él es imposible, en realidad sólo sabía que estaba en Lorie, si ese lugar pertenecía a otro más grande o no, eso ya no lo sabía, pero quizá eso era lo que significaba la palabra "Novato", el desconocer todo. El primer paso de todo estaba cumplido, que era divisar a una persona para hablar. En este caso, se trataba de lo que parecía ser una mujer y no veía nadie a su alrededor sumiéndola en una conversación, así que se acercó sin más, poniéndose delante de ella y levantando una mano en forma de saludo. Si gracias a ella averiguaba lo que tenía que hacer, entonces tendría prácticamente todo resuelto y si ella era algo más fuerte que un médico como él, entonces podría pedirle formar un equipo de caza, porque según sabía, los "Support" eran muy codiciados por ser un tanto escasos en el mundo de Aeon.
-Hola muy buenas.- Saludó con una sonrisa. -Estoy perdido y la verdad es que no sé qué hacer.- Explicó de forma calmada y lenta, para que no se alterase. No sabía cómo podía reaccionar. -Me llamo Derek y no sé cómo he llegado aquí. ¿Me indicaría qué hacer nada más empezar?- Concluyó metiendo las manos en los bolsillos, esperando una respuesta positiva.
Fue una tarea bastante tediosa porque siempre acababa en el mismo sitio. O eso o es que todas las calles eran iguales, pero al final consiguió encontrar la plaza, que tenía una hermosa fuente en el centro, parecía ser de mármol, pero tampoco podía dar muchos datos si no era un experto en eso. Una de las cosas más curiosas, es que nadie le había parecido reconocer como médico llevando el traje que no había tenido ocasión de cambiar, además de que tampoco había visto ningún sitio parecido a un hospital, nada relacionado con eso. Quizá la gente herida no tuviera cabida en esa ciudad o puede que estuviera en una parte que aún no ha visitado, pero hasta que lo supiera, esa era una duda más a preguntar a alguien. A pesar de todo lo que intentaba disimularlo, se le notaba a kilómetros que el pobre Derek estaba más perdido que un pulpo en un garaje. El sentido de la orientación no era una de sus virtudes precisamente, aunque tampoco era un defecto, si bien con un mapa podía encontrarse fácilmente.
Derek empezó a mirar a todos lados muy desconcertado, la plaza era un lugar muy concurrido y ahora estaba en la misión de encontrar alguien que estuviera solo o al menos que lo pareciese, para poder preguntar algunas cosas. Estar más perdido que él es imposible, en realidad sólo sabía que estaba en Lorie, si ese lugar pertenecía a otro más grande o no, eso ya no lo sabía, pero quizá eso era lo que significaba la palabra "Novato", el desconocer todo. El primer paso de todo estaba cumplido, que era divisar a una persona para hablar. En este caso, se trataba de lo que parecía ser una mujer y no veía nadie a su alrededor sumiéndola en una conversación, así que se acercó sin más, poniéndose delante de ella y levantando una mano en forma de saludo. Si gracias a ella averiguaba lo que tenía que hacer, entonces tendría prácticamente todo resuelto y si ella era algo más fuerte que un médico como él, entonces podría pedirle formar un equipo de caza, porque según sabía, los "Support" eran muy codiciados por ser un tanto escasos en el mundo de Aeon.
-Hola muy buenas.- Saludó con una sonrisa. -Estoy perdido y la verdad es que no sé qué hacer.- Explicó de forma calmada y lenta, para que no se alterase. No sabía cómo podía reaccionar. -Me llamo Derek y no sé cómo he llegado aquí. ¿Me indicaría qué hacer nada más empezar?- Concluyó metiendo las manos en los bolsillos, esperando una respuesta positiva.
Invitado- Invitado
Re: Doctor On Duty.
por Invitado Jue Jul 25, 2013 2:54 am
Cual era la costumbre de cierta gunner, Lorie era su punto favorito el cual visitar, no solo por su tranquilidad y belleza arquitectónica sino también porque era el punto de reunión de muchos otros jugadores dispuestos a buscar grupos, pero no solo ese era un motivo por el que ella, Sasha, se le veía a menudo por esos lares, existía un pequeño café no muy lejos de la plaza principal que frecuentaba en cada momento de descanso o aburrimiento, según sea el caso. Caminó por las calles transitadas en dirección a su lugar preferido pero por extraña razón no se detuvo, continuó su avance lento y con paso elegante en una sola dirección, la plaza principal ¿Cuál era su motivo? Ni siquiera lo supo, simplemente fue guiada por su instinto y a la vez por su curiosidad sobre ese sentimiento, algo la llamó a ese mismo punto llevándose una pequeña sorpresa con la cantidad de gente ahí, parloteando, preparando y organizando. Había visitado varias veces la ciudad pero ese punto exacto, la plaza, siempre la evitó por la rutina. — "Salir de la rutina siempre nos da sorpresas." — Pensó y esbozó una pequeña sonrisa sin verse agobiada por tanta concurrencia.
Se abrió paso entre la gente con amabilidad silenciosa pues no respondió a ninguna de las palabras o frases hechas hacia su bella figura, la suerte de ellos al estar el PvP desactivado así como también el que ella fuera una persona pacífica que evitaba en su mayoría los conflictos entre jugadores. Tal vez por ello era que evitaba ese lugar, entre tanto jugador y programa existía una posibilidad de encontrar patanes listos para lanzarse a la carne cuales perros hambrientos así que en su actitud no hubo diferencia entre encontrarse en el café a encontrarse en ese punto por lo que buscó rápidamente un punto vacío (O al menos el más vacío) y caminó hacia él. Se trató de un espacio cerca de una pequeña fuente en donde terminó sentándose sobre el borde, cruzando la pierna izquierda sobre la diestra y de inmediato sus manos se colocaron sobre la loza con la que estaba recubierta la fuente. Dio un suspiro y su rostro mostró seriedad, esa seriedad engañosa a la que algunos temían y otros ignoraban tal fue el caso de ese joven con ropa de medico que se acercó a ella con radiante sonrisa y actitud amigable con la que saludó así sin más.
Ella sonrió con ligereza pero con toda cordialidad mientras lo escuchó hablar sobre su problema, el típico problema de aquellos nuevos en cualquier mundo digital, nada difícil de resolver. En cuanto terminó no pudo evitar reír suavemente y de manera divertida por lo dicho y más que nada por la respuesta que de inmediato pensó y así mismo emitió. — No es muy complicado saber como haz llegado aquí porque caminaste y por supuesto que puedo decirte que hacer. — Con un pequeño golpe sobre la loza de la fuente con su diestra lo invitó a sentarse a su lado sin importar lo extraño de su vestimenta que por si sola gritaba que clase escogió. — Mi nombre es Sasha Lagard y por tu vestimenta puedo deducir que eres alguna clase dedicada al soporte ¿Me equivoco? — Dijo sin esperar a que tomara asiento. Su mirada lo observó a los ojos luego de haberlo visto de pies a cabeza de una manera sutil y discreta, a simple vista le pareció una persona agradable así como interesante por el simple hecho de destacar con su vestimenta.
Se abrió paso entre la gente con amabilidad silenciosa pues no respondió a ninguna de las palabras o frases hechas hacia su bella figura, la suerte de ellos al estar el PvP desactivado así como también el que ella fuera una persona pacífica que evitaba en su mayoría los conflictos entre jugadores. Tal vez por ello era que evitaba ese lugar, entre tanto jugador y programa existía una posibilidad de encontrar patanes listos para lanzarse a la carne cuales perros hambrientos así que en su actitud no hubo diferencia entre encontrarse en el café a encontrarse en ese punto por lo que buscó rápidamente un punto vacío (O al menos el más vacío) y caminó hacia él. Se trató de un espacio cerca de una pequeña fuente en donde terminó sentándose sobre el borde, cruzando la pierna izquierda sobre la diestra y de inmediato sus manos se colocaron sobre la loza con la que estaba recubierta la fuente. Dio un suspiro y su rostro mostró seriedad, esa seriedad engañosa a la que algunos temían y otros ignoraban tal fue el caso de ese joven con ropa de medico que se acercó a ella con radiante sonrisa y actitud amigable con la que saludó así sin más.
Ella sonrió con ligereza pero con toda cordialidad mientras lo escuchó hablar sobre su problema, el típico problema de aquellos nuevos en cualquier mundo digital, nada difícil de resolver. En cuanto terminó no pudo evitar reír suavemente y de manera divertida por lo dicho y más que nada por la respuesta que de inmediato pensó y así mismo emitió. — No es muy complicado saber como haz llegado aquí porque caminaste y por supuesto que puedo decirte que hacer. — Con un pequeño golpe sobre la loza de la fuente con su diestra lo invitó a sentarse a su lado sin importar lo extraño de su vestimenta que por si sola gritaba que clase escogió. — Mi nombre es Sasha Lagard y por tu vestimenta puedo deducir que eres alguna clase dedicada al soporte ¿Me equivoco? — Dijo sin esperar a que tomara asiento. Su mirada lo observó a los ojos luego de haberlo visto de pies a cabeza de una manera sutil y discreta, a simple vista le pareció una persona agradable así como interesante por el simple hecho de destacar con su vestimenta.
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Re: Doctor On Duty.
por Invitado Jue Jul 25, 2013 2:10 pm
Aquella chica de nombre Sasha le prestaba atención, no podía decir toda, pero si bastante, hasta se veía bastante bromista, pero bueno, por ahora prefería no decir bromas, quizá hubiera sido una mera coincidencia o el típico comentario de buenas a primeras para dar buena impresión. Él no podía mentir, siempre era así, tan enérgico y con tan buen entrante, no es que fuera un despreocupado, pero tampoco era uno de esos afligidos que se pasaban el día lamentándose y lloriqueando por algo del pasado, aunque no podía desmentir, que a veces si se entristecía. El muchacho asintió y fue a sentarse al lado de aquella mujer, que cabe decir, que se veía realmente hermosa, al menos desde los ojos de un hombre con un gusto normal y poco peculiar como el de las mujeres. Pequeño pervertido que nunca había llegado a nada más allá de la observación y el silencio. Apoyó ambas manos sobre las rodillas tensando los brazos y dirigiendo la mirada hasta los ojos de la chica, sonriendo y asintiendo, pues si, tenía razón sobre su "vocación", pero no era muy difícil darse cuenta.
-Sí señorita, así es.- Le dio la razón antes de concretar un poco más. -Soy un médico y bueno... Mm... No tengo problema en ejercer cualquier rama de la medicina, pero sin duda, la que mejor se me da es la cirugía.- Mientras explicaba, echaba un vistazo más profundo y analítico al cuerpo de la chica, desde luego era notorio lo que estaba haciendo, pero él quería intentar averiguar su especialidad, pero no terminaba de dar con ella. -¿Y usted? ... Por más que la miro, no llego a adivinar nada más salvo que es muy hermosa.- Dijo dando un leve suspiro. La verdad es que con sus palabras pretendía llevarse bien con ella, si algo sabía, era tratar con mujeres y a la mayoría le gustaba que le dijeran esas cosas, fuera de eso, era un verdadero caballero. No era un ligón, simplemente un asegurador de aliados. Según su "padre", el peor enemigo aparte de uno mismo, es una mujer en su contra. -¿Aquí hay algún hospital o algo así? En lo que he visto de la ciudad no he encontrado ningún edificio relacionado... Jaja, mientras llegaba, me sentí enlatado.- Bromeó, pero no demasiado, no quería pasarse.
-Sí señorita, así es.- Le dio la razón antes de concretar un poco más. -Soy un médico y bueno... Mm... No tengo problema en ejercer cualquier rama de la medicina, pero sin duda, la que mejor se me da es la cirugía.- Mientras explicaba, echaba un vistazo más profundo y analítico al cuerpo de la chica, desde luego era notorio lo que estaba haciendo, pero él quería intentar averiguar su especialidad, pero no terminaba de dar con ella. -¿Y usted? ... Por más que la miro, no llego a adivinar nada más salvo que es muy hermosa.- Dijo dando un leve suspiro. La verdad es que con sus palabras pretendía llevarse bien con ella, si algo sabía, era tratar con mujeres y a la mayoría le gustaba que le dijeran esas cosas, fuera de eso, era un verdadero caballero. No era un ligón, simplemente un asegurador de aliados. Según su "padre", el peor enemigo aparte de uno mismo, es una mujer en su contra. -¿Aquí hay algún hospital o algo así? En lo que he visto de la ciudad no he encontrado ningún edificio relacionado... Jaja, mientras llegaba, me sentí enlatado.- Bromeó, pero no demasiado, no quería pasarse.
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